ISBN: 978-987-88-3646-1
En el libro PASAJERAS DEL ALAMBRE Beatriz Bustos
rompe metafóricamente su alma, lo hace en una fragmentación armoniosa, como un
puzle, donde las partes son necesarias para completar la existencia.
El poemario del cual se
desprende el título es sugestivo, porque, tal vez sin saberlo la poeta tiene la
necesidad de compartir y lo hace con hermetismo, así poder «demostrar mediante
un lenguaje llanamente racional» sus pensamientos.
En él dice: «Ha dejado de
llover. /Las pasajeras del alambre/ han descendido por la escala del sol, /y
eso, para ellas, es buen augurio». Transita por el «filamento gris» del
inconsciente colectivo como una pasajera más. Habla de mujeres que, como gotas de
lluvia, se aferran al alambre para no caer.
En la segunda parte del libro,
como es su estilo, utiliza la función emotiva, centrada en el “Yo” ficcional,
luego, emerge entre sus líneas el “yo” poético. Como dice el escritor Roque Santos «todas las elecciones realizadas por
el “yo poético”, en tanto que enunciador de un discurso imaginado, delatan las
huellas del escritor y no del autor real».
Sus poesías, son ramillete de
sensaciones, se reconoce en algunos de ellos: «Podar la raíz del escepticismo/
que me enseñó a/ abrazar los huecos».
Para concluir el libro,
recopiló cuentos breves y un Drama en dos actos. En toda la obra puede verse el
excelente manejo de la metáfora y las imágenes sensoriales.
En la prosa utiliza un símbolo
que es común en sus textos: el tiempo, que puede percibirse en las palabras que
plasma en el relato El oficio eterno: «Lo que me entristece es no haberles
dicho que yo detendré su mecanismo y sé la hora exacta».
El libro PASAJERAS DEL ALAMBRE de Beatriz Bustos es un mar donde el lector
podrá sumergirse una y otra vez; sus palabras son olas que lo llevarán,
siempre, mar adentro de la vida.
La autora sabe comunicarse con
el lector de una manera profunda y sensitiva.
Kairós
«El momento adecuado u oportuno»
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